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La Ingeniería Química ha tenido un gran impacto en la sociedad latinoamericana gracias a experiencias exitosas y lecciones aprendidas. El desarrollo de proyectos que aprovechan los recursos naturales es uno de ellos.
En países como Brasil, México y Argentina se han realizado proyectos ingenieriles a gran escala para extraer y procesar recursos valiosos como petróleo, gas natural y minerales falta referencia. Estas iniciativas han mejorado la economía local y generado empleo. Además, gracias al acercamiento con el medio ambiente se ha podido minimizar los efectos adversos sobre este. Por su parte, en naciones como Colombia y Perú, la ingeniería química ha aportado al avance de enfoques para conservar los alimentos y procesar las materias primas agrícolas. Gracias a estas innovaciones, se ha logrado disminuir la cantidad de alimentos desperdiciados, estirar el período de validez de los productos y asegurar su inocuidad, lo que favorece inmediatamente a los consumidores. Más allá de los logros materiales, la Ingeniería Química en Latinoamérica ha aprendido importantes lecciones a traves de los años con diferentes perspectivas .Una de estas lecciones, es la necesidad de fomentar la inclusión y la equidad de género en la profesión. Aunque la participación de mujeres en la ingeniería ha aumentado en los últimos años, aún queda mucho por hacer para promover una mayor representación femenina en este campo. Es fundamental eliminar barreras y estereotipos, así como proporcionar oportunidades de educación y desarrollo profesional para todas las personas interesadas en la ingeniería química, independientemente de su género. Otra lección clave, es la importancia de la responsabilidad social en la práctica de la Ingeniería Química. Los ingenieros químicos deben tomar conciencia de los impactos de sus acciones en la sociedad y el medio ambiente, y trabajar de manera ética y responsable. Esto implica considerar los aspectos sociales, económicos y ambientales de los proyectos y promover soluciones que beneficien a las comunidades en las que se llevan a cabo. La participación y consulta de las comunidades locales, también son fundamentales para garantizar que los proyectos sean aceptados y apoyados por aquellos que se verán directamente afectados por ellos. Los ingenieros químicos latinoamericanos han aprendido que el desarrollo tecnológico no puede desligarse de las realidades sociales y culturales de la región. También, han comprendido la importancia de escuchar a las comunidades locales y tener en cuenta sus necesidades y perspectivas al desarrollar proyectos de ingeniería. En conclusión, la Ingeniería Química en Latinoamérica ha dejado un legado significativo. Las experiencias exitosas en el aprovechamiento de recursos naturales y el desarrollo del sector agroindustrial han mejorado la calidad de vida de las personas y contribuido al desarrollo económico. Sin embargo, también se han aprendido lecciones importantes, como la necesidad de promover la inclusión de género y la responsabilidad social en la práctica de la ingeniería química. Estas lecciones nos recuerdan que, en última instancia, la ingeniería debe servir al bienestar de la humanidad y del planeta en general. Autora: Alejandra Inestroza, ingeniería química, UNAH Banner: Moises Sanchez |